«Quiéreme cuando amanezca»
Quiéreme cuando el día se levante
cuando despierte el beso de tu boca,
deja que convertida en una loca
beba de tu veneno suplicante.
Lléname de tus ansias el instante
que abrazada a tu cuerpo hecho de roca,
ávida del deseo que provoca
tú viril juventud de buen amante.
Piérdete entre mis pocas vanidades
húmeda buscaré tus amarguras
deja que te sofoque tempestades
con mis labios haciéndote diabluras
antes que mis intrépidas bondades
sientan que se detienen tus ternuras
Maria de los Angeles Espinosa